No es nada fácil dejar de creer en algo que tu corazón ha defendido a "capa y espada", como dicen.
No es nada fácil obligar a tu corazón a plantearse otro matiz.
No es nada fácil obligar a tu mente a cambiar de rumbo.
No es nada fácil quitarse los anteojos que nunca quisiste quitarte, porque ahora es el momento de hacerlo y debes resistir, aprender y seguir adelante.
No es nada fácil, tratar de comprender lo incomprensible, lo intolerable, lo increíble.
No es nada fácil, olvidarte y por decisión unánime, alejarme.
No es nada fácil amarte más a ti que a mi.
No es nada fácil olvidar.
Pero, ¿quién dijo que el camino es fácil? Así que supongo que mis pies tienen razón. Voy por el camino correcto.
P.D: Lo que si es fácil, es sacarte de mi a través de mis ojos. Y es más fácil hacerlo con el empujoncito que me diste.
Gabriela Mayora