¡Sorpresa!

"...ingenuo, espontáneo y dulce... un disparo directo al corazón."

  No sé quién escribió o dijo eso. Lo encontré traspapelado en mi escritorio. La razón por la cual lo traje acá es que es hermoso cuando sucede eso. Cuando estamos distraídos o muy concentrados quizá, y ¡puf! se nos presenta algo tan hermoso que nos es imposible dejarlo pasar... se paraliza el tiempo, el Sol se queda inmóvil asegurándose de que tengamos suficiente luz para que nos demos cuenta de esa presencia, nos asombramos como niños, y agradecemos a Dios y al Universo por ser partícipe de ese momento. Nos quedamos con ese pedacito de felicidad en el corazón, para siempre.

D.C.